Democracia y libertad de las conciencias

Democracia y libertad de las conciencias

En todos los ámbitos del actuar humano –también lógicamente en el jurídico y en el económico- las valoraciones en cada instante y circunstancia se realizan a través de las conciencia personal de cada cual que consiste en esa facultad humana de unificar la compleja variedad de datos que son aportados por los diferentes sentidos en cada momento actual –lo que da lugar al sentido común en el actuar presente- o, también, en la facultad de interrelacionar y unificar el cúmulo de datos pasados que forman la memoria sensitiva. Así mismo, la conciencia intelectiva es capaz de unificar ideas y conceptos así como reflexionar en el nivel puramente intelectual. Es ese mundo espiritual y de las ideas -muchas veces olvidado- que, por otra parte, ha estado y está continuamente creándose y recreándose.

En Innovación Democrática sabemos que el recinto más sagrado de la libertad personal se encuentra en la propia conciencia. Los grandes principios –nunca decaídos y siempre renovadores- se manifiestan y actúan a través de la visión interior personal de todos y cada uno de los habitantes concretos diseminados por toda la geografía mundial sin distinción de razas. La Ética se manifiesta siempre a través de la conciencia de las distintas personas que existen, viven y actúan en cada instante temporal de cada época histórica. Se puede decir entonces que en el ámbito de la bondad o maldad del actuar humano, cuando el sujeto juzga con su conciencia cierta –es decir, sin ningún prudente temor a errar- determinados actos como lícitos o ilícitos, convenientes o nocivos, buenos o malos, ese juicio tiene valor de norma actual para el sujeto en tanto en cuanto que la conciencia concreta y actualiza en las circunstancias presentes los principios generales y, en definitiva, el principal y radical principio universal: “Haz el bien y evita el mal.” De ahí la gravedad de tantos intentos de manipular las conciencias.

INNOVACIÓN DEMOCRÁTICA considera que se debe hacer una profunda reflexión sobre el comportamiento individual en sociedad y quiere por ello destacar en primer lugar la necesidad urgente de regenerar, promocionar y extender la calidad del medio ambiente social, es decir, del medio ambiente humano que los ciudadanos crean en sus interrelaciones personales. Desde el momento que hablamos de acción humana o reflexionamos sobre el comportamiento individual en sociedad estamos ya hablando también de aspectos éticos. De hecho la ciencia de la Ética nos indica el orden idóneo del actuar humano de cara a sus fines últimos. Por ello, INNDE luchará por la implantación y desarrollo de los valores éticos rechazando toda forma de corrupción en la vida pública.

José Juan Franch Meneu. Fundador y Coordinador General de Innovación Democrática