Inmersos en esta vorágine de cambio trepidante

Inmersos en esta vorágine de cambio trepidante con velocidad acelerada en todos los campos, he decidido ir a la contra, echar el freno y hacer un parón silencioso interior para tratar de comprender -contemplar- cuál es la situación actual del mundo y qué está pasando.

Y para tratar de sacar así propósitos de enmienda, porque si algunas cosas -o muchas-  vemos que van mal algo de culpa tenemos cada uno de nosotros.