La creación del instante. (Memorias) – ONCE

LA CREACIÓN DEL INSTANTE
(MEMORIAS)

ONCE

Investigar por dentro en nuestro mundo original, y descubrir al fin que no es original sino universalmente peculiar.

Como el vino acaba emborrachando por muy fuerte y habituado que se encuentre el cuerpo, así el rezar, también a pocos, acaba emborrachando de locura a quien como yo, quiere conseguirlo todo, amarlo todo, soñar con todo, conquistarlo todo pacíficamente. ¿Qué será esta borrachera de universalidad que quizás todos llevamos dentro y que por temor y respetos humanos escondemos discretamente en los entresijos de la cabeza y el corazón? ¿Qué será que al ver un árbol, una ardilla, un mirlo, una pizarra o un mármol blanco; y no digamos esta o aquella persona, los engrandecemos en su pequeñez porque sabemos que aquel conglomerado que vemos entonces no se repetirá ni para mi, ni para nadie más? No sólo lo material. También la música -esta o aquella- cambia el rumbo de mi sensibilidad sugiriendo tal o cual idea antes no descubierta. Es aquella canción que ha puesto mi hija en compac‑disc la que sugiere nostalgia, melancolía o alegría, y la que hace activar la memoria nostálgica, melancólica o alegre. ¡Qué sensación más fuerte aquella que descubre, sintiéndolo, que todo está concatenado, todo entrelazado, todo en misteriosa unión conyugal amorosa!

Tú, esposa mía, me llevas del ronzal guiándome en la oscuridad aparentemente luminosa de la locura. Contigo la locura se torna cordura, y la querencia a huir se transforma en afán intenso de volver a tu regazo.

Monólogo desnudo frente al espejo.

Anacronismo que se intercala presto a recordarnos que todo ha sido también, y también será.

La tendencia al atavismo de inventar algo que le procure una cierta embriaguez.

Recuerdo los rizos de aquel churumbel, el guiño de aquella mujer, la mirada alicaída del adolescente que se cree fracasado.

Cansancio primaveral de quien se agota amando entre el florecer de almendros, cerezos y albaricoqueros.

Actuar con la reciedumbre de una melé en el Rugbi.

Perfil sereno que hipnotiza de paz hasta el león más fiero.